La descarga de los pollos en el matadero se organiza en función de los deseos y las posibilidades del matadero. Gracias al uso de los pisos móviles del remolque, en combinación con una unidad de descarga, los pollos pueden entrar fácilmente en el matadero a través de cintas transportadoras. Durante este proceso tampoco es necesario tocar los animales, por lo que las posibilidades de que sufran lesiones se reducen a un mínimo.
Es preferible utilizar dos remolques, colocándolos uno al lado del otro, para garantizar la entrada continua de pollos y evitar los ganchos vacíos durante el proceso de sacrificio.
Ya que únicamente los pollos entran al matadero (sin jaulas o contenedores) las exigencias de higiene en el matadero se reducen considerablemente. Al no utilizar jaulas o contenedores sucios, tampoco se necesita una gran instalación de lavado y se ahorra mucho espacio en el matadero.